Más leído
- 1. El Grupo Fagor Ederlan adquiere el 51% de la empresa norteamericana Regen Aluminum
- 2. Abierta la convocatoria para los Premios TFG-TFM MONDRAGON Sariak 2025
- 3. “Embega trabaja para lanzar en 2025 la producción industrial a gran escala de un componente clave para un dispositivo médico innovador”
- 4. La Asamblea General de Eroski decide destinar la totalidad de sus excedentes netos del 2023 a fortalecer su patrimonio
- 5. Fiesta de la creatividad en la presentación de los Trabajos de Fin de Grado en Comunicación Audiovisual
- 6. Domusa Teknik refuerza la producción de bombas de calor para un hogar más eficiente
Ikerlan y Mondragon Assembly colaboran para crear un robot destinado al sector salud

En el proyecto se ha utilizado la metodología de producción de bienes de equipo desarrollada por Ikerlan, también conocida como “producción rítmica”. Se trata de un sistema probado con éxito en varias empresas y que permite asegurar el plazo de entrega de un sistema productivo de bienes de equipo altamente personalizados.
El robot Kiro Oncology elimina el margen de error humano en la dosificación de la medicación
El proyecto, ya finalizado, ha conseguido asegurar y reducir de forma significativa las horas del montaje del hardware del robot. Ikerlan y Mondragon Assembly han preparado seis programas de montaje con diferentes ritmos, y han realizado un exhaustivo análisis de la normativa de la Food and Drugs Administration norteamericana (FDA), que resultará útil en futuras revisiones del proceso de montaje. El modelo de gestión flexible implantado optimiza los límites productivos de las instalaciones actuales.
También se ha llevado a cabo la formación del equipo de Mondragon Assembly para asegurar una correcta evolución del proceso e incluso para aplicarlo a otros posibles productos. De hecho, el proyecto ha demostrado que el planteamiento desarrollado puede extenderse asimismo a los bienes de equipo más seriados.
El robot Kiro Oncology, al automatizar la preparación de la quimioterapia, elimina el margen de error humano en la dosificación de la medicación, aumentando así la seguridad de los pacientes, al tiempo que minimiza los riesgos químicos para los técnicos sanitarios; todo ello de una forma más eficiente y económica.