Más leído
- 1. 10 proyectos premiados en los MONDRAGON TFG-TFM Sariak 2024
- 2. Fagor vuelve al mercado del Confort
- 3. La XII edición del Foro MONDRAGON reúne en el Kursaal a más de 400 personas de las cooperativas
- 4. Javier Amezaga, nuevo director general de la División de Equipamiento de MONDRAGON
- 5. MONDRAGON y Mondragon Unibertsitatea México fortalecen su colaboración para la innovación y el desarrollo de talento en América Latina
- 6. La campaña de ayuda a las personas damnificadas por la DANA sigue activa en Eroski
- 7. Pello Rodríguez se reúne con el lehendakari Pradales
- 8. MONDRAGON celebra su Foro de Finanzas
- 9. Matrici solicita la apertura de la fase de liquidación
- 10. “Estoy muy ilusionado, MONDRAGON es un proyecto apasionante”
Fallece Alfonso Gorroñogoitia, cofundador de la Experiencia Cooperativa
Fue uno de los cinco socios fundadores de la primera cooperativa, Ulgor. El funeral se llevará a cabo el lunes 9 de septiembre, a las 7 de la tarde en la parroquia San Juan Bautista de Arrasate.
Alfonso nació en Mondragón (Gipuzkoa) el 25 de octubre de 1924. En 1942, con 15 años, entró como aprendiz en la Unión Cerrajera de Mondragón, terminando, cuatro años después, los cursos de Maestro Industrial Mecánico. En la Unión Cerrajera fue el oficial encargado del departamento de Electricidad.
En 1952 obtuvo el título de Perito Industrial Electricista, realizando los estudios en la Escuela Profesional de Mondragón, y examinándose, por libre, en la Escuela de Peritos de Zaragoza.
Fue el padre de los estatutos y normas de muchas cooperativas y su magisterio al frente de las asambleas de Ulgor, de Caja Laboral y del Congreso era tal que su presencia y oratoria hacía que la asistencia a estas reuniones fuera mucho mayor.
En 1955, junto a cuatro compañeros de la Acción Católica y de la mano de José María Arizmendiarrieta, comenzó a desarrollar lo que sociológicamente se conoce como la Experiencia Cooperativa de Mondragón, de la que ha sido uno de los principales líderes y a la que ha dedicado toda su vida profesional.
En 1959 asumió la presidencia de Talleres Ulgor, que ejerció durante 24 años, y ese mismo año también fue designado presidente de Caja Laboral Popular, cargo que ocupó hasta 1989.
Además, también fue presidente del Grupo Fagor entre 1965 y 1989, y ocupó la presidencia del Grupo Cooperativo Mondragón entre 1984 y 1989. Asimismo, también fue presidente de la Federación de Cooperativas de Euskadi-Erkide, fue miembro del Consejo Económico y Social del Gobierno Vasco, además de miembro en la Federación de Cooperativas de España, de Cepes y de Coceta, y consejero de Iparlat.
Reconocimientos
El pasado mes de mayo, Ormaetxea y Gorroñogoitia fueron homenajeados por "su liderazgo, compromiso, esfuerzo y tenacidad en su apuesta utópica de impulsar el cooperativismo de Mondragón" en la Asamblea General de Arizmendiarrietaren Lagunak.
Por su intensa vida profesional Alfonso ha recibido diferentes reconocimientos, como el Premio Txemi Cantera de Economía Social, otorgado por ASLE; la Medalla de Oro de Gipuzkoa de la Diputación de este territorio, o la Gran Cruz de la Orden de San Silvestre, concedida por el papa Juan Pablo II.
Alfonso también fue presidente de la Juventud Deportiva de Mondragón, participó en “Proyecto Hombre”, fue miembro de honor de la Fundación José Maria Arizmendiarrieta y fue miembro de la Junta de Acción Católica.
Hombre de profundas convicciones religiosas, solía decir cuando le preguntaban por la faceta sociológica y empresarial de su tutor Jose María Arizmendiarrieta, que en primer lugar era “sacerdote”.
Era “el presidente”, con su peculiar forma de hablar y su ejemplo de austeridad y honradez, se encargó de perfilar la arquitectura institucional de las cooperativas en los primeros años de existencia.
En el ámbito personal, Alfonso estaba casado con Purita Iturbe (QEPD) y era padre de tres hijos y una hija.
En su despedida como presidente de Caja Laboral, el 17 de marzo de 1989, fue el propio Alfonso Gorroñogoitia quien manifestó frente a los socios de la cooperativa su deseo de ser recordado "en verdad con una leyenda breve de cuatro palabras, fue un hombre honesto, o si se quiere sofisticar la idea pretendió ser un hombre honesto consigo mismo y con los demás". Y, efectivamente, así le recordaremos, como un hombre honesto, trabajador infatigable y un cooperativista ejemplar.
Agur eta ohore Alfonso!