"Nuestro mayor reto es seguir siendo competitivos sin renunciar a nuestros principios y valores"

Txomin García S. Coop., se podría decir. 47 años de trayectoria profesional, todos ellos en cooperativas. Por tramos de 15 años, prácticamente; los últimos 15 en Laboral Kutxa, en la presidencia de la entidad. Un apasionado practicante de la Experiencia Cooperativa, utópico y con los pies en la tierra. De ánimo templado, voz de barítono, y prosodia envidiable, inicia una nueva etapa en la que se propone volver a sus orígenes y cultivar otras artes como la lectura, la música, la pintura, el modelaje… y la conexión con la naturaleza.

Eskerrik asko por concedernos esta entrevista. No has concedido muchas a lo largo de tu carrera, ¿no es así?

Es correcto, no he concedido muchas, algo que contrasta con las innumerables charlas, conferencias y foros en los que he participado y es que me interesa más el contacto directo y dirigirme directamente a las personas a las que tengo algo que decir, una entrevista siempre es fría y no da pie a la interacción, en los contactos directos me siento más a gusto.

Además, como buen guipuzcoano soy más de hacer que de decir, soy de los que piensan que las cosas no se dicen, se hacen, porque al hacerlas se dicen solas.

¿Con qué estado de ánimo terminas tu travesía profesional?

Sin duda alguna, ha sido una vida profesional muy intensa, vivida con mucha pasión y responsabilidad y en la que me ha tocado transitar por muchos estados de ánimo diferentes. Si tuviera que resumir brevemente mi estado de ánimo actual es el de satisfacción por lo que he hecho y también por lo que no he hecho. En puestos de alta responsabilidad hay que hacer lo que se debe y lo que se puede y a veces hay que contenerse y no hacer lo que a uno le gustaría. En las decisiones que se toman hay que tener siempre en cuenta que más allá de las visiones y ambiciones profesionales propias hay una organización de personas a las que hay que alinear y motivar e implicar con los retos y no siempre es correcto intentar llevar tus ideas adelante sin tener esto en cuenta.

A la hora de hacer balance de tus 47 años como profesional ¿con que te quedas? Dime tres cosas.

Sería más sencillo si me hubieras pedido que te dijera las 100 o 200 cosas con las que me quedaría de estos 47 años, pero, aunque me pones en un aprieto pidiéndome sólo tres voy a intentar extraer con las que me quedaría.

La primera y más importante, es la de haber sido parte de esta Experiencia Cooperativa: única, irrepetible, ilusionante, admirada (a veces más por los foráneos que por quienes formamos parte de ella) de la que estoy muy orgulloso y por la que merece la pena dedicar una vida profesional. En mi caso no sólo profesional ya que me incorporé a la misma con apenas 17 años y podría decir que mi vida biológica coincide con mi vida profesional y que lo que soy como profesional y como persona está muy condicionado y moldeado por la vivencia de esta experiencia y sus valores.

En segundo lugar, me quedo con la satisfacción de que mis actos y mis decisiones, incluso en las situaciones más difíciles, siempre han estado guiados por los principios y valores surgidos de nuestra Experiencia Cooperativa. Jamás he renunciado a ellos, siendo consciente en todo momento de que cuando estás en un puesto de tanta responsabilidad somos más responsables de los fracasos que de los éxitos, ya que estos últimos son siempre colectivos.

En tercer lugar, de mi vida profesional me quedo con la cantidad de personas, tan interesantes, con las que he compartido penas y alegrías, retos e ilusiones, buenos y malos momentos, muchas de ellas muy buenos amigos y amigas. Y también con el respeto y la confianza y gestos de cariño que en mi vida profesional he sentido de las personas de las distintas cooperativas de las que he formado parte.

"El cooperativismo es una actitud"

Siempre ligado a proyectos S. Coop. (Scoiner, Aurki, Ulma, Ikerlan, MU, LK, LagunAro).  ¿Casual o intencionadamente?  ¿Qué tiene la S. Coop. que atrapa tanto?

Soy cooperativista desde mi adolescencia, porque tuve la oportunidad de iniciarme en la vida profesional en una cooperativa de Hernani, cuando cursaba estudios de maestría industrial y compaginaba estudios con trabajo. Me incorpore al mundo cooperativo en un momento social muy "singular". Tenía 17 años recién cumplidos y como muchos adolescentes del momento, muchas inquietudes sociales, un gran anhelo de libertad y una fundada preocupación por que nos iba deparar el futuro. Vivíamos en una dictadura.

En mi caso, 1976 supuso un momento transcendental en mi vida con mi incorporación a esta pequeña cooperativa de Hernani, San José Sociedad Cooperativa Industrial (SCOINER) y que, bajo la tutela de la División Empresarial de Caja Laboral, trataba de poner en marcha y consolidar una nueva actividad.

Este mi primer contacto con el mundo de la empresa me marcó para el resto de mi vida. Tengo un gratísimo recuerdo de los dos años que pasé en esta cooperativa; recuerdo un grupo de personas entusiastas que trabajaban y se esforzaban por llevar a la actividad empresarial las ideas de Don José Maria Arizmendiarrieta, de que había que “transformar la empresa para transformar la sociedad”.

En SCOINER comencé a conocer lo que representaba la Experiencia Cooperativa de Mondragón: empresas democráticas, un socio un voto, principios de solidaridad y cooperación, dignidad de la persona, compromiso social… Hoy nos parecen atributos normales, al menos en nuestro entorno, pero en aquella época eran como un himno de libertad y esperanza, era una utopia por la que había personas dispuestas a comprometerse y sacrificarse. En mi mente de adolescente idealista y soñador percibí que el modelo cooperativo que representaba aquella pequeña empresa tenía un papel importante que desempeñar en la sociedad.

Terminada la Maestría me dispuse a iniciar los estudios de Ingeniería Técnica y para entonces ya conocía la existencia de Eskola (hoy MU) y empezaba a tener una primera visión de lo que representaba la Experiencia Cooperativa de Mondragón. Corría el año 1978, superé las pruebas de acceso a Eskola y me vine a estudiar y a vivir en Mondragón.  Don José María había fallecido en noviembre de 1976, pero su figura, su pensamiento, su enfoque humanista de la empresa estaba presente en todo lo que rodeaba la Experiencia Cooperativa de Mondragón, su obra:  Eskola, Caja Laboral, Lagun Aro, el centro de Investigación Ikerlan fueron piezas clave ideadas y puestas en marcha bajo el impulso imparable de Don José María. Él había creado un entorno en Mondragón que en mi imaginario de adolescente idealista era un entorno revolucionario al que merecía la pena entregarse y definitivamente, enseguida supe, que quería formar parte de él.

Yo no nací cooperativista, fue el entorno, la transcendencia que representaba el sentido de la experiencia para una sociedad necesitada, la vivencia de los principios y valores cooperativos lo que me cautivó. Me convertí en cooperativista viviendo sus valores y sintiéndome parte de su propósito. A lo largo de mi vida profesional he tenido oportunidades de incorporarme a Sociedades Anónimas, pero nunca encontré un propósito que justificara otras supuestas ventajas.

En el aspecto más pragmático, ningún modelo empresarial, por muy utópico e idealista que sea, se puede construir desde el fracaso económico.

Háblame de la Experiencia Cooperativa. ¿Crees que es un modelo de futuro?

A la Experiencia Cooperativa de Mondragón no se si la definiría como un modelo, creo que sobre todo es un referente, una forma de responder a los retos que como sociedad hemos tenido, tenemos actualmente y sin duda tendremos en el futuro, un modelo tiende a homogeneizar y un referente debe servir para orientar hacia un propósito común con unos principios y valores compartidos. No hay una forma única de responder a ese propósito.

¿Si tiene futuro? La Experiencia Cooperativa de Mondragón se ha calificado en muchas ocasiones como una utopia, una utopía se define con dos elementos: algo deseable que parece de muy difícil realización y la representación imaginativa de una sociedad futura de características favorecedoras del bien humano. Nuestra experiencia cooperativa tendrá futuro en la medida en que seamos capaces de construir ese futuro y esto no es un modelo, es sobre todo una actitud.

En el aspecto más pragmático, ningún modelo empresarial, por muy utópico e idealista que sea, se puede construir desde el fracaso económico.

Nuestras cooperativas no son ONG´s, desarrollan su actividad en una economía de mercado, predominantemente capitalista, sometidas a las fuerzas de la competencia y su futuro depende de su competitividad, del desempeño de sus organizaciones y del talento de sus personas, pero esta ha sido nuestra realidad histórica durante más de 70 años, demostrando que podemos hacerlo, adaptándonos a los retos y siendo muy conscientes de nuestras fortalezas y debilidades. Nuestro mayor reto es seguir siendo competitivos sin renunciar a nuestros principios y valores.

Estoy convencido de que las organizaciones, como las nuestras, con principios y valores y un claro sentido del propósito, son atractivas cuando de retención y atracción de talento hablamos.

Nuestra Experiencia Cooperativa es una realidad, admirada, prestigiada y reconocida en todo el mundo, con un propósito, principios y valores sugerentes y necesarios en una sociedad donde los valores de solidaridad, cooperación y compromiso social se debilitan a pasos agigantados y con ellos la cohesión social, la convivencia, la igualdad y el bienestar social. Como desde nuestros inicios, seguimos teniendo un rol importante que desempeñar.

En un futuro muy próximo la competitividad de nuestras cooperativas se va a jugar en el ámbito del conocimiento, del talento que desarrollen nuestras personas, en el desarrollo de las competencias actuales y sobre todo en la retención y atracción del talento a nuestras organizaciones. Y estoy convencido de que las organizaciones, como las nuestras, con principios y valores y un claro sentido del propósito, son atractivas cuando de retención y atracción de talento hablamos.

¿Ha habido hitos en la trayectoria de la Experiencia que te hayan marcado especialmente?

Para mí, el descubrir y empezar a formar parte de esta Experiencia Cooperativa ya fue un hito importante, por lo que significaba en aquel momento y lo que representaba.

Aunque no viví su génesis y sus primeros años, me he interesado mucho por su evolución, desde sus inicios con la llegada de D. José María a Mondragón, por su persona, por sus primeros actos, por la historia, vivencias y logros de sus pioneros y cuanto más profundizo en el conocimiento de nuestra Experiencia Cooperativa más me alucina e impresiona lo que consiguieron poner en marcha y más orgulloso me siento de formar parte de ella y también más responsable del legado que hemos recibido.

He participado en todos los congresos de MONDRAGON, desde el constituyente hasta el último de este año, he vivido la transformación del Grupo, el crecimiento de sus cooperativas, la caída de algunas, los cambios y más cambios acometidos para responder a los continuos retos, desafíos y sensibilidades que hemos afrontado y nos han traído hasta aquí.

No cabe duda de que las cooperativas y agentes que han sido protagonistas en cada momento de nuestra experiencia cooperativa la han hecho posible, estén ahora incorporados o no en MONDRAGON, contribuyendo entre todos a alcanzar unos logros de desarrollo empresarial impensables hasta significarse como un referente mundial del cooperativismo reconocido y admirado en muchos lugares del mundo.

Pero también he podido observar cómo la divisa sobre la que D. José María comenzó a construir nuestra Experiencia Cooperativa “las ideas nos separan, las necesidades nos unen”, se ha ido debilitando el principal valor de nuestra experiencia: la unidad, el sumar juntos. Porque más allá de momentos económicos más o menos favorables, desencuentros y demás argumentos, la Experiencia Cooperativa de Mondragón, en mi opinión, sobre todo debe ser un referente, no sólo para el exterior sino también para las personas que formamos parte de ella. Y en esta defensa de principios y valores sumar es muy importante, mantener la unidad creo que necesaria para competir, influir, hacernos oír en un mundo que no es cooperativo, que en muchas ocasiones no nos tiene en cuenta cuando se trata de desarrollos de marcos jurídicos que terminan afectándonos o de programas que fomenten el desarrollo de un modelo socioeconómico que sin duda es un patrimonio social.

La Experiencia Cooperativa de Mondragón, singular, diferente, tiene muchos retos y desafíos por delante que deberían hacernos comprender que la divisa de D. José María “las ideas nos separan, las necesidades nos unen” sigue teniendo toda su vigencia.

"Hay otra forma". ¿Hay que reivindicarlo con más fuerza?

Yo creo que esto na va de reivindicaciones, va de actuar “de otra forma”, acorde a nuestros principios y valores cooperativos, por que como te decía antes “las cosas no se dicen, se hacen, porque al hacerlas se dicen solas”.

"Laboral Kutxa está llamada a hacer grandes cosas"

En clave musical, parafraseando al mítico grupo Burning: ¿qué hace un ingeniero como tú en un sitio como este –Laboral Kutxa–? ¿Qué tipo de aventuras son las que has venido a buscar?

Pues muchas veces yo también me he hecho esa pregunta. Soy ingeniero vocacional, de diseño, porque desde muy joven me han atraído las máquinas, los engendros que surgen de la imaginación, de la creatividad y del conocimiento técnico y científico que las hace posible.

Mis primeros años profesionales estuvieron centrados en esta disciplina y los disfruté enormemente. Luego tuve la oportunidad de pasar a la gestión, la gerencia de ULMA Packaging tuvo el atractivo de poder responsabilizarme de todas las variables empresariales que podían convertir ese fruto de la técnica en un negocio competitivo y hacerlo crecer. Fueron casi 15 años apasionantes que me enseñaron que la creatividad también tiene otros ámbitos de aplicación más allá de las máquinas. El ingeniero se iba transformando en gestor y también descubriendo otros ámbitos de disfrute y realización personal. Los ocho años como director general del Grupo ULMA, creo que me permitieron desarrollar las habilidades de gestión en organizaciones complejas y en ello estaba cuando pensaron en mi para asumir la presidencia de Laboral Kutxa, tras la primera sorpresa y preguntándome muchas veces qué iba a hacer un tipo como yo en el sector financiero, pensé que la confianza que el Grupo había depositado en mí para presidir una institución y un icono de la Experiencia Cooperativa de Mondragón como es Laboral Kutxa, era una responsabilidad que tenía que asumir y a ello me he entregado en cuerpo y alma durante los últimos 15 años.

Hoy somos la decimoprimera entidad del estado por volumen de activos, lideres en solvencia y liquidez y con una rentabilidad muy destacada.

¿Qué balance haces de tu paso por la presidencia? ¿Satisfecho?

Muy satisfecho. Me han tocado años muy duros y difíciles, hemos tenido que afrontar la mayor crisis que ha sufrido el sector financiero de su historia, en la que hemos visto desaparecer una gran parte de las entidades, algunos bancos y las cajas de ahorro han desaparecido o se han visto obligadas a fusionarse y convertirse en bancos.   Laboral Kutxa no sólo ha superado esta crisis, sino que ha salido de la misma muy fortalecida y sin renunciar a nuestro modelo cooperativo.

Antes de la crisis y del proceso de reconversión y reestructuración del sector nuestra posición en el ranking de entidades financieras no aparecía entre las 50 primeras, hoy somos la decimoprimera entidad del estado por volumen de activos, lideres en solvencia y liquidez y con una rentabilidad muy destacada.

Estos son los logros, pero la gran satisfacción me la ha producido en cómo lo hemos conseguido, ha sido un trabajo colectivo donde las personas de la organización han realizado un trabajo en equipo extraordinario con un desempeño profesional sólo a la altura de su compromiso y responsabilidad con lo que nuestra entidad representa para el mundo cooperativo. Estoy muy orgulloso de haber formado parte de este equipo de cooperativistas comprometidos.

Tengo el total convencimiento y la confianza de que Laboral Kutxa va a hacer grandes cosas, está guiada por un noble propósito que la acompaña desde su nacimiento y un colectivo de personas comprometidas, solidarias y grandes profesionales.

¿Cómo visualizas la Laboral Kutxa del futuro, afectada por tantos retos –digitalización, talento, cambio climático, regulación, acción social …–?

Tengo el total convencimiento y la confianza de que Laboral Kutxa va a hacer grandes cosas, está guiada por un noble propósito que la acompaña desde su nacimiento y un colectivo de personas comprometidas, solidarias y grandes profesionales.

Como el resto de las cooperativas del Grupo, se tendrá que enfrentar a nuevos y difíciles retos, en un entorno competitivo que te pone a prueba todos los días. Pero es lo que viene haciendo desde hace ya casi 65 años.

Un apasionado confeso del renacimiento como tú, de la creatividad y la imaginación, ¿cómo ha convivido con el control permanente de las “entidades reguladoras”

Aquí podríamos decir aquello de que cuando no tienes alternativa es mejor que te centres en hacer bien lo que toca.

Con la regulación bancaria sólo tienes dos alternativas cumplirla o tener que cumplirla. La primera opción es proactiva y hay que buscar la forma de adaptarte y cumplir con ella y aunque haya poco margen aquí también hay algo de espacio para la creatividad y la imaginación. La segunda alternativa es reactiva y emana de los requerimientos del supervisor y con mucho menos margen y tiempo para adaptarte.

Además, hay que tener muy en cuenta que la regulación bancaria evoluciona, cambia, tratando de responder a los nuevos retos que se presentan y puedan poner en riesgo la estabilidad financiera: retos derivados del cambio climático, ciberseguridad, protección de datos, blanqueo de capitales… por citar sólo algunos de los ámbitos que actualmente están teniendo un fuerte impacto en materia de regulación y supervisión…

En breve, pasará a estar regulada por el Banco Europeo, ¿no es así? ¿Supondrá esa circunstancia algún cambio significativo?

Desde la crisis financiera de 2008, el sector financiero ha cambiado radicalmente, desde su estructura formal, con el protagonismo que se le ha otorgado al Banco Central Europeo, que asume las funciones de supervisión y resolución, hasta un nuevo paradigma supervisor que nada tiene que ver con el existente antes de la crisis, ahora mucho más exigente en materia de regulación, gobernanza, modelo de negocio y con una supervisión holística mucho más intrusiva.

El Banco Central Europeo ha ordenado a las entidades de crédito en dos grandes grupos: entidades significativas (109 entidades que supervisa directamente) y entidades menos significativas (más de 5.000, delegando su supervisión en los Bancos Centrales de cada país). Laboral Kutxa está en disposición de pasar en los próximos años a entidad significativa y meterse en el selecto ranking de las 100 entidades más significativas de la UE.

Este paso a entidad significativa supondrá un reto de adecuación interna muy importante para responder a un nivel de supervisión mucho más exigente, algo en lo que ya estamos trabajando.

Nos encontraremos, también, en un entorno predominantemente capitalista en el que no se ha tenido muy en cuenta otros modelos distintos como el de las Entidades de Crédito Cooperativas y, entre estas, la singularidad de nuestro modelo, que es una rara avis. Sin duda alguna, el reto de los próximos años será el de adaptarnos a las exigencias y criterios de una regulación que no nos ha tenido en cuenta sin perder las esencias de nuestro modelo cooperativo. Todo un reto.

En clave personal

"Mi lista de things to do es muy larga"

¿A qué te suena lo de "jubilación"? ¿Cómo enfrentas la nueva etapa?

Personalmente espero que la jubilación se convierta en un período de mi vida muy agradable, donde poder disfrutar de todo lo que me rodea, familia, amigos, naturaleza…  recuperar aficiones aparcadas e ir reduciendo esa larga lista de “Things to do”, que a lo largo de una intensa vida profesional he ido acumulando y que, en mi caso, te puedo asegurar que es muy larga.

Me empieza a preocupar si voy a tener tiempo para dar rienda suelta a todas mis aficiones y hobbies, me temo que voy a seguir tan activo como en mi etapa laboral… pero dedicado esta vez a mí y mi entorno.

Al margen de tu actividad laboral, háblame del Txomin más cercano: qué aficiones practicas, qué lees, qué escuchas, qué te divierte, qué te emociona…

Pues según se acerca la fecha de mi jubilación, me empieza a preocupar si voy a tener tiempo para dar rienda suelta a todas mis aficiones y hobbies, me temo que voy a seguir tan activo como en mi etapa laboral… pero dedicado esta vez a mí y mi entorno.

Me encanta viajar, y a lo largo de mi carrera profesional he conocido a muchas personas de diferentes países y continentes, muchas son amigos y me gustaría poder visitarlos y disfrutar con ellos fuera del ambiente de trabajo. Me gusta leer, novela contemporánea e histórica (acumulo muchos libros en la lista de espera), también me gusta la música, disfruto de la ópera y la música clásica – mi hija Helene, es soprano y me emociona oírla cantar, me voy a convertir en su seguidor número uno– pero también de todo tipo de música que esté compuesta e interpretada con talento. Siempre me ha gustado hacer deporte y aunque ya no este para una olimpiada quiero también darle una prioridad en mi nueva situación, bici, senderismo… entre otros hobbies seguiré haciendo modelismo (siempre me ha relajado y ayudado a desconectar) y espero retomar una afición que aparqué de joven y que también me divertía y me gustaba mucho, la pintura.

¿Un titular para tu futuro inmediato?

¡Hacer que cada día cuente!

Horrela izan dadila Txomin.

Eskerrik asko guztioi eta eman didazuen guztiagatik. Ondo ibili!